A pesar de ser un problema completamente reconocido y al que
cada vez se dedica mayor esfuerzo y trabajo para combatirlo, el acoso escolar
sigue estando muy presente en las aulas.
Pero por qué es tan difícil acabar con el bullying. María José
Díaz-Aguado, explica que está ligado a un modelo individualista y competitivo
entre compañeros. Se trata de crear un modelo más participativo, enseñar a
cooperar y a competir, sí, pero desde la cooperación. Hay que lograr que los
alumnos se identifiquen con un proyecto común. El acoso escolar es la punta del
iceberg de problemas relacionados con la pervivencia de un modelo educativo
creado para una sociedad que ya no existe.
La sociedad está cambiando a toda velocidad pero en la
educación el proceso es más lento.
Es un tema muy complejo, y aunque tradicionalmente no era una
tarea de los profesores, hoy en día corresponde a la coordinación de centros y
al profesorado erradicar el acoso en la sociedad del siglo XXI .
Por otro lado, debe haber medidas sancionadoras para que los
acosadores cambien de conducta. No hay que ser pasivo ni cómplice, para
detenerlo hay que informar. Es una mala solución que sea la víctima quien tenga
que dejar el centro para salvaguardar su propio bienestar.
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