Nosotras y nosotros, estudiantes, profesorado y el conjunto de personas
de la comunidad educativa, preocupadas por la persistencia de conflictos y la proliferación de la violencia, de conductas de intolerancia en nuestras
sociedades y en diversas partes del
mundo, así como por la existencia del terrorismo y la guerra, verdaderos azotes
de la humanidad.
Alarmadas por el incremento de
situaciones de acoso escolar, de
matonismo en nuestras ciudades, de amenazas y abusos, de actos y conductas
denigrantes, agresivas y violentas en internet y en las redes sociales que atentan contra la integridad física y psíquica
de las personas.
Preocupados por la extensión de la intolerancia hacia las
personas diferentes, sobre la que se asientan infinitas conductas de
discriminación, odio y violencia que dañan la dignidad de la persona, su
libertad e igualdad de derechos que son inherentes a todos los seres humanos, impidiendo una convivencia en tolerancia y
concordia;
Reconociendo que la paz no sólo es la ausencia de
conflictos, invitamos a toda la ciudadanía y a las instituciones
democráticas a fortalecer su compromiso con la Cultura de Paz, que implica:
El respeto a la vida, el fin de
la violencia y la promoción y práctica de la no violencia por medio del el
diálogo, la cooperación, y en especial de la educación para la Tolerancia y la Paz.
El respeto pleno a la dignidad de
la persona y la defensa y promoción de los Derechos
Humanos y las libertades fundamentales, y el compromiso con la resolución
pacífica de los conflictos.
El respeto de la igualdad
de derechos y oportunidades de mujeres y hombres, y del derecho de todas
las personas a la libertad de expresión, opinión e información, impidiendo toda
forma de abuso y agresión escudados en las mismas.
El respeto y la promoción de la solidaridad y del derecho
al desarrollo humano y a la protección del medio ambiente para las generaciones
presentes y futuras.
La adhesión a los principios de
libertad, justicia, democracia, tolerancia, solidaridad, cooperación,
pluralismo, diversidad cultural y social, diálogo y entendimiento a todos los
niveles de la sociedad y entre las naciones,
animados por un entorno que
favorezca la paz y la no violencia.
En consecuencia, recordamos,
en este importante día, a los padres y madres,
maestros, estudiantes,
periodistas, políticos, intelectuales, artistas y a toda la
ciudadanía en general, la importante
responsabilidad que tienen en el compromiso de impulsar una cultura de
convivencia y paz en la humanidad; y de igual manera, la responsabilidad y
el papel informativo y educativo de los medios de difusión en promover esta
cultura de paz, el compromiso pleno que debe ejercer la sociedad civil en su
desarrollo y la responsabilidad de los
gobiernos cuya función es primordial en la promoción y fortalecimiento de la
cultura de la convivencia, tolerancia y de la paz.
Invitamos en este DÍA ESCOLAR DE
LA PAZ Y NO VIOLENCIA a trabajar y comprometerse
por hacer realidad aquello que el
preámbulo de la UNESCO declara y
afirma, recordándonos que “puesto que
las guerras nacen en la mente de los hombres, es en la mente de los hombres
donde deben de erigirse los baluartes de la paz”.
0 comentarios:
Publicar un comentario