El Día Mundial de las Personas Refugiadas se celebra todos los años el 20
de Junio para reflexionar sobre las causas y efectos del refugio e incitar
a participar en la defensa de los derechos de los hombres, mujeres y niñ@s que
se han visto obligad@s a huir de su hogar, porque temían por su vida, su
seguridad o su libertad.
El 2022 fue otro año de terribles
pruebas que amenazaron con colapsar muchas áreas de esperanza y progreso. La guerra en Ucrania desató una de las
crisis de desplazamiento más grandes y aceleradas en la historia de ACNUR,
además de una inestabilidad económica que repercutió en los mercados de
alimentos y combustibles a nivel mundial.
Los conflictos convulsionaron Etiopía, el Sahel, Myanmar y áreas del
este de la República Democrática del Congo. Las crisis prolongadas no
cejaron y, donde los conflictos se apaciguaron (como Afganistán o Sudán del
Sur), los riesgos y los peligros siguieron existiendo, en especial para mujeres
y niñas. El aumento de la pobreza, ya
acelerado por las privaciones de la pandemia, se precipitó con la escasez del
empleo y el aumento de los precios. Millones de personas se vieron forzadas
a emprender peligrosas travesías en busca de seguridad, con frecuencia viajando
junto a quienes intentaban construir un futuro mejor. La cantidad de personas
desplazadas por la fuerza se disparó a una cifra sin precedentes de 108
millones aumentando las presiones en los países de acogida y los donantes
humanitarios. Otras tantas eran apátridas.
#Refugiados #StopXenofobia
#DerechosHumanos #MovimientocontralaIntolerancia #Solidaridad #DerechoalAsilo
#Refugio
0 comentarios:
Publicar un comentario